Hace bastantes años surgió un
software de realidad virtual que hizo furor especialmente entre la población de
Estados Unidos, y que te permitía disponer de un avatar que te introducía en
una vida distinta a la normal, y que de algún modo te permitía vivir como otra
persona en un mundo tan ficticio como irreal.
Traigo al caso este recuerdo porque creo que se ha instalado algo
similar en la sociedad actual.
Desde siempre el ser humano
ha tenido que luchar por aquello que deseaba, cazar, pescar, cultivar y
recolectar su comida, defender sus posesiones de otros seres humanos o
animales, que de algún modo los deseaban o querían destrozarlos, defender a la
familia y seres queridos, y asi sucesivamente.
Con el tiempo hemos ido consiguiendo desarrollarnos como especie y nos
hemos rodeado de unas costumbres y de un derecho generado acuerdo a ellas y a
nuestra forma de vida. Gracias a esta lucha disfrutamos ahora de nuestro
sistema de derechos y libertades y nos permitimos creernos en posesión de una
vida tranquila y en la que todo se puede negociar y hablar para llegar a un
consenso. Cediendo algo se consigue algo, viene a ser la pauta. Hemos ido
olvidando como hemos conseguido esto, las ideas que en origen consiguieron que
esto fuese posible, el esfuerzo e incluso guerras que nos han traído hasta aquí
y los principios morales que nos
diferencian de otras culturas o civilizaciones. Hemos llegado a la convicción
de que somos capaces de vivir por encima de todo esto y que somos
autosuficientes y capaces de todo por ser nosotros y sin más. En cierto modo
nos hemos imbuido en nuestra propia SECOND LIFE hasta el punto de que olvidamos
que los principios como la libertad y la propia vida requieren ser cuidados y
defendidos. Y no solo ello sino que buscamos justificaciones para superponer la
paz a cualquier otra situación aun cuando dicha paz pueda ser esclavitud o
rendición a otras culturas o grupos que acaben para siempre con nuestra
libertad o incluso con nuestras vidas.
Parecemos no entender que la paz que no es libre no es paz sino el
preludio de nuestra esclavitud. Los romanos aun lejanos a nuestro nivel actual
de libertades ya conocían este peligro y nos dejaron la máxima "si vis pacem, para bellum", indicándonos
que la paz tiene un precio y que si la deseas en ocasiones tienes que estar
preparado para luchar por ella.
En ocasiones hay principios
por los que hay que luchar para mantenerlos o al menos estar dispuestos o
preparados para ello si finalmente es el caso. Muchos políticos, normalmente de los que se
llaman progresistas, parece que creen haber descubierto la verdad absoluta,
creyendo que son los únicos iluminados que saben como proceder ante las cosas y
que todo lo que antes se hizo no vale para nada e ignoran todo lo que la
experiencia de sus antecesores pueda a portar, como pensando ser superiores a
aquellos en los siglos precedentes han ido afrontando esas misma situaciones y
problemas. Esa superioridad moral en ocasiones les ciega y no se dan cuenta
bajo mi punto de vista de las barbaridades que defienden y la escasa o nula
base intelectual y de conocimiento común
de que hacen gala. Lo peor es que muchas personas con limitado conocimiento y
pocas ganas de tenerlo, los siguen sin mayor razonamiento y generan movimientos
sociales peligrosos que hacen doblar la rodilla a aquel que conociendo la
problemática y teniendo más o menos claro como obrar, acaba adoptando tibias
soluciones que no dejan de ser prorrogas para que el problema crezca y nos
sepulte con el tiempo. Hay decisiones que hay que tomar y no valen parches
posibles.
Esto que más o menos pensé en
su día en alusión a problemas normales como la cuestión catalana toma especial actualidad tras los atentados
que asolaron una cuna de nuestra civilización y de nuestros derechos y
libertades.
Dejo de antemano que no se
con seguridad cual es o debe ser la solución a tomar ante esta situación, ya
que en base a la complejidad de la misma no me atrevo a adelantar algo tan
trascendente, aunque tengo seguro que esperar otro golpe sin hacer nada no es
la solución, eso si. En base a esto creo que hay muchos muy equivocados o que
nos quieren equivocar, y son aquellos que defienden como solución el diálogo y
que piensan que la situación económica es el único problema que genera que los
terroristas caigan en estas actitudes y en cierto modo volcando la carga de la
culpa sobre nuestra insolidaridad o incluso sobre aquellos gobiernos que en
defensa de sus libertades han protagonizado ataques o acciones políticas contra
los radicales musulmanes del Isis.
Cierto es que pescar en zonas
de hambre es el foco de todos los radicalismos, y que en ocasiones occidente ha
jugado a favorecerse de su desgracia con la venta de armamentos y otras
actividades ilícitas. Pero no nos engañemos, esto también lo hacen aquellos a
quienes atacamos, aun siendo a menor escala. En eso no dejamos de ser seres
humanos con parecidos vicios y defectos.
Sin embargo no debemos
confundirnos, ya que si bien todos somos seres humanos, no todos somos iguales,
y si bien en nuestra sociedad y cultura es factible el diálogo, ellos no son
iguales. No son personas que busquen un bien común o mejorar la convivencia
entre las distintas culturas. Simplemente viven en el fanatismo, quieren imponer su cultura y creencias a
aquellos que según ellos son impíos y viven en constante pecado. Desean acabar
con nuestras libertades porque atacan sus creencias y atraen cual flautista de
Hamelín a sus paisanos y vecinos con su lujo y vida desenfrenada, y su religión
les legitima a acabar con el infiel y
todo aquel que impidan que su sueño se realice. No tienen piedad ni de los
musulmanes, que compartiendo su fe, no siguen sus preceptos con la disciplina
que el DAES desea.
Sinceramente creo que
dialogar con alguien que profesa tal
fanatismo es imposible como pudo serlo en su día hacerlo con algún fanático
nazi, pero con el agravante que conlleva el matiz religioso extremo que
adjunta.
Debemos ayudar a estos países
y pueblos a implantar la democracia con
sus derechos y libertades y colaborar a mejorar la situación económica. Debemos
abandonar la venta de armas a estos
países y dejar de beneficiarnos de ellos para hacerles crecer y ser todos mas
fuertes. Pero no creo que nadie pueda olvidar el daño que han realizado, y no
solo en Europa, también en otros países vecinos y no tan cercanos, mas creo que
el no haber reaccionado antes o impedido la expansión de estos terroristas, no
nos impide reaccionar cuando tocan nuestra casa o la del vecino. ¿Acaso todos
actuamos cuando hay un robo, u otro tipo de ataque o delito en cualquier punto
de España o solo nos enfrentamos cuando lo hacen en nuestra vivienda o a
alguien conocido?. No seamos falsos, en
todas las facetas de nuestra vida, la gran mayoría de nosotros solo reaccionamos
cuando lo tenemos cerca el problema. Y pese a eso nunca nos hemos considerado
sin el derecho de asi hacerlo por no haber ayudado a otros que han sufrido
similares situaciones. Es un falso buenismo pero creo que lo que busca no es
tanto ayudar a aquellos que lo necesitan, sino deslegitimar a aquellos que así
lo podemos ver necesario. Es un juego de palabras y significados al que siempre
perderemos, ya que siempre se pueden buscar palabras, frases lapidarias o
incluso buenas acciones a las que aludir para enfrentar a cualquier actuación,
pero tras este pérfido juego muy común en los políticos, solo se oculta un falso ingenio que busca algo
oscuro y oculto por esas mismas palabras.
Para afrontar este problema
es necesario conocer con quien estamos tratando, que desea y hasta que nivel
esta dispuesto a ceder, y teniendo en cuenta que su única fuerza estriba en el
terror que motivan y en las amenazas que nos hacen llegar. Siendo estas sus únicas
bazas es raro pensar que estén dispuestos a negociar nada. Pero esto sería si
fuesen humanos normales, pero en su caso se ven iluminados por Alá y con una
misión divina a la que una ley democrática normal no podrá comprar o asustar
con penas o castigos mayores. Alguien que esta dispuesto a volar con una bomba
con sus enemigos difícilmente se echara atrás por una amenaza. Por tanto
nuestro estado de derecho y nuestra desgana por afrontar o defender nuestros
derechos y libertades se ven superadas con creces por la fuerte voluntad de su
fanatismo. Estamos en un punto en el que por desgracia, hablar de guerra no es
una locura infundada, pero tenemos que tener todos claro lo que nos jugamos y
es necesario estar unidos. Ellos nos conocen y nos tienen perfectamente
calados, y no ignoran que estamos desunidos, moralmente sin principios y saben por
aquello que no lucharemos y que ellos si lo harán incluso con la pérdida de su
vida por su unidad y porque defienden una voluntad divina. Saben que si alguien
dice de ir a la guerra muchos de nosotros le haremos que pare o incluso lo
abandone aludiendo esa palabra tan bonita como inexistente, la paz. Ayer fue París pero mañana puede ser Madrid,
Barcelona, Sevilla o Bilbao, entre otros. Cuando hayan matado a cualquiera de
nuestros familiares y amigos, ¿de que paz estaremos hablando o podremos hablar
a sus seres cercanos y queridos?.
Hablamos de diálogo, pero el único que ellos ofrecen es amenazar con el
terror y la muerte a toda Europa, Estados Unidos y Al-Andalus, que por si algún
iletrado lo desconoce somos nosotros, España. Sinceramente, creo que algunos ya deberían
abandonar su Second Life particular y saber que ellos tienen claro que es una
batalla de desgaste, por población o por invasión lo van a conseguir si no
ponemos especial cuidado en ello. Nosotros defendemos a los deportados y
refugiados que nos envían y para ellos no es más que un medio de camuflar entre
estos, ocultos ante nuestra bondad, a
sus activistas, como ya ha ocurrido con alguno en el atentado de París.
Mientras pedimos paz y
respeto por ellos y morimos lentamente, solo tienen que esperar y clavarnos sus puyas
sin compasión para que nos vayamos desangrando y nos enfrentamos en absurdas polémicas
religiosas, políticas o sociales sobre que puerta debemos cerrar, si la de la
libertad o la defensa de la propia vida. Mientras tanto entran por ambas y
acabaran con nosotros.
Os dejo el enlace de alguien que escribe mejor que yo aunque no suelo coincidir en sus juicios y que hace varios años ya contempló lo que en parte ahora vemos una vez más y los motivos que nos traen hasta esto, Arturo Pérez Reverte. Creo citarle cuando dijo “Los políticos han sustituido a los historiadores, y eso es gravísimo” ... yo añadiría, los políticos que desconocen la historia o quieren confundir al resto para que la desconozcan. De esos polvos vienen estos lodos....
Os dejo el enlace de alguien que escribe mejor que yo aunque no suelo coincidir en sus juicios y que hace varios años ya contempló lo que en parte ahora vemos una vez más y los motivos que nos traen hasta esto, Arturo Pérez Reverte. Creo citarle cuando dijo “Los políticos han sustituido a los historiadores, y eso es gravísimo” ... yo añadiría, los políticos que desconocen la historia o quieren confundir al resto para que la desconozcan. De esos polvos vienen estos lodos....